Acompáñame en mi silencio

lunes, 19 de enero de 2015

Ilustres Ignorantes

   Llega un momento en la vida que te acercas a las personas mas ilustres de una época marchita.
Ese momento en el que te codeas con los grandes genios o los posibles sabiondos de turno.
Te detienes y contemplas que les falta entre tanta intelectualidad algo de vida.
Podrán nombrarte autores de carrerilla que nunca hayas podido oír ni de mencionar acompañados de la pronunciación de un idioma que desconoces o incluso escribir semejante jeroglífico para recordarlos, no será tarea fácil, pero ellos te miran con cara de lastima por tu sutil ignorancia y entonces les devuelves la mirada porque esas persona delimitan su cuerpo de su mente y las alejan de su corazón.
Entienden de términos pero no de situaciones determinantes... Recuerdan detalles minuciosamente pero no cuentan con cada detalle.
Evitan a toda costa el mundo de las emociones porque es el único lugar donde son incapaces de ser.

  Siento lastimas por los intelectuales y por los que se quieren parecer a ellos. Siento tanta admiración como desprecio. Siento que esto les será incoherente, siento que esto no lo van a sentir, y por una vez, no lo van a entender, ni van a saber responder excusándose con algo ilustre.