No tomes una decisión el año que viene, el mes que viene, la semana que viene, mañana, tómala hoy, ahora, en este instante. Saborea el fracaso de la precipitación. Aquí siempre es seis, aquí siempre hay consecuencia que pagar...
Las prisas no son buenas para nada. Toma el tiempo que necesites, piensa lo que necesites, sigue con el show hasta cuando se cierre el telón, pero aguanta para poder tomar tu decisión porque es será de las pocas cosas realmente tuyas... Sigue tus impulsos pero corrigelos. Corrigete.
Perseverancia, constancia, dedicación, esfuerzo, pasar por el aro, pasártelos por el aro...
¿Lo fácil? Lo fácil es criticarlo todo pero no entenderlo, es poner un "pero"... donde debe haber un "yo hago".
Te vengo hablar de las trincheras, de las personas que no sólo se conforman con cambiar el mundo, si no que lo cambian, que lo consiguen, que están llenas de ilusión y pasión, que hay que saber topar con gente que se debe modelar esa esencia.
Te arrepentirás más de lo que abandones, de lo que no intentes, que de lo que hagas, no lo digo desde la experiencia, lo digo desde la vida que ha tocado, desde el mundo, desde la realidad, desde dónde tu estás y yo estoy, desde todos los puntos de vista y ante todo desde la más puta complejidad me ando enamorando.
Ahora imagina, imagina que hay varias puertas y sólo puedes abrir una:
1. La carrera de tus sueños, tu formación, la realización personal elevada al máximo exponente.
2. El trabajo de donde nunca te vas a querer retirar.
3. La familia perfecta.
4. El sueño de viajar... a tu manera, pequeños detalles que conformen una vida.
5. Lxs amigxs que se pueden contar hasta el infinito y más allá
6. El amor de tu vida que te abraza las noches que hace frío.
pero el caso es que tu no sabes que puerta abre cada idealización, aun así, siempre eres tú quién decide entrar una vez abierta...
No se puede tener todo,
te dirán,
y tú te lo creerás...
